Juchitán, Oax. – Con el ímpetu al máximo, el pasado viernes por la tarde se llevó a cabo el magnífico concierto con motivo del primer aniversario del grupo de música prehispánica Guidxiguie’, del taller de pitu nisiaaba’ de la Dirección municipal de Cultura de la ciudad de Juchitán.
Esta actividad forma parte del ciclo de conciertos iniciados en el Parque Charis, en abril pasado, y que ahora se realizan cada viernes en el parque “Benito Juárez”.
Con las luces brillando, la indumentaria portada con orgullo, y la euforia del público presente, el recital lo inició el grupo Gueresaa, integrado por tres talentosos jóvenes de la Séptima sección, que interpretaron piezas como Son Calenda, Xmale Guzina y La Negra Tomasa.
Luego tocó el turno al grupo de Tehuantepec Beedxeyú, quienes fueron alumnos del maestro Héctor Sánchez Santiago, titular del taller de pitu nisiaaba’, durante dos años mientras ocurría la pandemia por COVID19, quienes ejecutaron temas clásicos de esta música, como: Nisi riga nuu barriga, Bere Xhiga, la danza del tigre, entre otros.
A su vez, el grupo Bigarí, integrado por las y los más pequeños del taller de la Dirección, cautivó al público con su talento y demostraron que, no por ser más pequeños, significa que no estén a la altura de sus compañeros más grandes. La multitud presente y las madres y padres de familia no dejaban de aplaudirle.
Para cerrar la noche con broche de oro, tocó el turno de los anfitriones, los festejados de la noche, el grupo Guidxiguie’, compuesto por integrantes de entre 8 y 14 años der edad, que demostraron lo aprendido a lo largo de sus primeros doce meses en el taller, portando orgullosamente sus conjuntos rojo carmesí y guayaberas, respectivamente.
Su actuación dio el cierre perfecto a una velada amenizada con emblemática música de la región.
Antes de finalizar la presentación, a nombre del alcalde, el director de Cultura entregó un merecido reconocimiento a quienes participaron en el programa de aniversario, y uno en especial al maestro Héctor Sánchez Santiago, por sus 32 años como instructor, y destacó su labor y dedicación a lo largo de su trayectoria, entregando su dedicación en El Espinal, Tehuantepec, Tlaxiaco, Matías Romero, por mencionar algunos lugares.
Asimismo, invitó a todas y todos a participar en actividades que ayuden a promover y preservar nuestras costumbres y tradiciones, pues son la puerta para que las nuevas generaciones continúen realizando actos que desarrollan su sentido artístico, cultural y musical.
Antes del cierre, el maestro Héctor regaló dos flautas, elaboradas por él en 1995, a la alumna Hillary Sesma Vera, pues resaltó su dedicación en sus clases y agradeció el haber permanecido en el taller desde el primer día, acto que cautivó al público, quienes ovacionaron con una ola de aplausos.
