Justin Trudeau anunció este lunes 6 de enero su renuncia como primer ministro de Canadá tras enfrentar crecientes presiones dentro del Partido Liberal y una dramática caída en su popularidad.
En un mensaje a los medios, Trudeau admitió que, aunque es un «luchador», no es la mejor opción para liderar al partido en las próximas elecciones. Confirmó que dejará su cargo una vez que los liberales seleccionen a un nuevo líder mediante un proceso nacional competitivo.
Trudeau, quien asumió el poder en 2015, agradeció a los canadienses por el apoyo durante su gestión y recordó los desafíos enfrentados, incluida la pandemia de COVID-19. Sin embargo, el desgaste político y las crisis internas precipitaron su salida.
Entre los factores que complicaron su mandato están el incremento del costo de vida, la crisis de vivienda y un deterioro en los servicios públicos. Las encuestas recientes posicionan al Partido Conservador con una ventaja de más de 20 puntos sobre los liberales, quienes podrían caer al cuarto lugar parlamentario.
Además, la renuncia de Chrystia Freeland, exministra de Finanzas y aliada clave de Trudeau, junto con exigencias públicas de al menos 20 diputados liberales, terminaron de erosionar su liderazgo.
El líder del Nuevo Partido Democrático, Jagmeet Singh, anunció que apoyará una moción de censura contra el gobierno el próximo 27 de enero, lo que acelerará el llamado a elecciones anticipadas.