Con una celebración eucarística, trabajadores del volante pertenecientes a diversas organizaciones, conmemoraron este lunes su tradicional festividad en honor a este gremio del transporte público en la capital oaxaqueña.
Con cohetes, monos de calenda y bandas de música, las y los taxistas partieron en calenda desde la calzada Madero, hasta llegar al atrio del templo de Guadalupe, lugar donde se ofició una misa de acción de gracias para agradecer por su trabajo.
Las unidades de motor lucieron relucientes debido a que cada una de ellas iban adornadas con arreglos florales, listones multicolores y con imágenes religiosas.
Durante el desfile, las filas de taxis, paralizaron el tránsito vehicular por unos minutos y a su paso regalaban dulces y globos a los niños, quienes, junto a sus padres observaban.
En tanto, decenas de familias salieron de sus hogares para aplaudir y reconocer la labor que desarrollan como prestadores de servicio, cuya aportación es elemental para ofrecer a visitantes el rostro humano y confianza con el que se genera estabilidad económica en la ciudad y en la región.