A dos años y nueve meses de los hechos criminales que dejaron un saldo de 15 indígenas ikoots muertos en Huazantlán del Río, en el municipio San Mateo del Mar, los familiares continúan pidiendo justicia.
Con una manifestación en la Agencia Estatal de Investigaciones de la Fiscalía General del Estado (FGEO) los familiares denunciaron que el proceso avanza lento y el dolor por los acontecimientos trágicos sigue latente, pue las autoridades han sido omisas a sus demandas, señalaron.
Demandan cárcel para los responsables materiales e intelectuales de la masacre en esa población del Istmo de Tehuantepec.
Mencionaron que Camerino Dávalo, uno de los principales cabecillas e instigadores de los hechos, sigue en libertad y los responsables de la masacre no han sido llevados ante la justicia.
Ante la impunidad por la falta de justicia, los familiares denunciaron que a dos meses de la llegada de un nuevo Fiscal General a Oaxaca, no han visto avance concreto.